Brevísima y caprichosa crónica de la Primera Historia y de la complicada entrada a la Segunda

Brevísima y caprichosa crónica de la Primera Historia y de la complicada entrada a la Segunda

“¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra,

Una ficción, y el mayor bien es pequeño,

Que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son”

Calderón de la Barca

Es de buen augurio reconocernos en esta vida como viajeros  empedernidos desde el instante que nos creó la naturaleza hace ciento cuarenta mil años

Somos seres planetarios que viajamos de la realidad hasta el sueño y del  horizonte del mar hasta el deseo infinito en busca de ser felices

Hemos hecho caminos interminables y aprendimos a construir nuevas realidades y costumbres con el afán de convertirnos en más humanos a imagen y semejanza de lo desconocido

Pero las mismas realidades en las cuales vivimos nos advierte que somos la única especie que se tropieza varias veces con la misma piedra.

En el primer siglo del tercer milenio tropezamos y caímos en las arenas movedizas de lo absurdo

Se perdió el rumbo de las cosas ciertas por creencias falsas y codicias verdaderas

Se dejó que las oportunidades de oro vuelen ciegas como aves nocturnas perdidas en plena luz del mediodía

El camino del progreso asfaltado por el aprendizaje cotidiano dejó de combinar el sentido ético de la filosofía con el sentido útil de la ciencia para la vida

Los errores y enmiendas dejaron de darse la mano y le faltó leña al fuego para aprender a construir bien la escalera hacia el abierto destino colectivo de consciente convivencia

Muchos siglos atrás surgieron los santuarios de la propiedad privada sin puerta para la gente común que se acostumbró por las malas a conformarse y ponerse de lado o rebelarse como el ave fénix cada cierto tiempo en su condición de esclavos-siervos-ciudadanos de última categoría que tienen escondido el grito entre los pliegues cerebrales

Cuidado con el perro-vigilancia 24 horas del día rezaban los últimos carteles de los últimos siglos de la primera génesis colgados en rejas y tranqueras adornadas con cadenas

Los egoístas se repartieron el mundo en aplicación de la filosofía de la iluminación personalista y la auto-distinción del talento excluyente

Igual se repartieron los oficios de señores-brujos-guerreros que la vida partida en pedazos y la escuela vieja tuvieron como eje transversal del aprendizaje a la dominación y la aceptación de la dominación

Así la historia se pobló de sombras en los guetos- reservas indias-fronteras elevadas-vertederos de la historia por doquier

En los atardeceres de los tiempos hemos tenido una existencia de reyes con sus cortes y de súbditos con sus pesadas cargas sobre hombros hasta el instante preciso de la gran hecatombe

Las profecías nunca llegaron a plasmar la utopía del bienestar social porque en los caminos empedrados prevalecieron el ojo por ojo y el diente por diente de la práctica del odio y del sadismo hasta que se atravesó el Rubicon de aguas sucias y agitadas con las Tres Guerras Mundiales

Muchas pero insuficientes voces valiosas de hombres y mujeres de occidente y oriente dijeron en todos los tiempos e idiomas que venía la hecatombe de dimensiones indescriptibles

Por estas latitudes el premonitorio Aníbal Quijano anunció con resignación pasajera que el fin de la historia no ocurrirá de modo pacífico y el gran costo será para todos aunque no sabía de la suerte que correrían las víctimas

“Es el momento –dijo- de romper las rejas del eurocentrismo y de preparar la otra Historia que resultará de las grandes luchas que ya están a la vista ¡Esa nueva Historia puede ser nuestra Historia¡”

La Tercera Guerra –Religiosa- dejó de lado la hipocresía social que siempre ocultaron los pecados capitales debajo de todas las alfombras

Abundó

Soberbia terrorista de los imperios

Avaricia de los financistas

Envidia de los políticos

Ira de los armamentistas

Gula del primer mundo

Lujuria del hambre

Pereza de los inocentes e ingenuos

El fuego de los infiernos de Dante cayó como una maldición consentida sobre todas las cabezas

Los generales de la guerra desde cómodos bunkers solo apretaron los botones para dejar libres viejos demonios con cuerpo de gases amarillos, drones avispas y misiles atómicos

El colonialismo de los imperios utilizó bases militares en cuatrocientos cincuenta colonias que dibujaban el mapamundi de la época

En los asaltos asesinaron a soldados y poblaciones de oriente y del hemisferio sur del planeta hasta que el último tiro les salió por la culata

El pecado original de la bomba de Hiroshima abrió paso a la multiplicación de los desastres y convirtió en sangre a las aguas del planeta

Quedaron algunos países convertidos en oasis demográficos con muy poca agua recuperada y pocas cavernas e instalaciones bajo tierra

La depredación solo nos dejó vestigios de civilizaciones con mutaciones genéticas y contaminaciones extremas

En menos de lo que canta el gallo los dueños de hace cinco mil años enterraron vivas a las antiguas sociedades comunitarias

Se perdieron el gozo del fuego del hogar y  el diario compartir del trabajo y los productos de la caza-pesca- agricultura

Las antiguas guerras resultaron pequeños ensayos frente al último evento de depredación de la naturaleza y de la propia especie humana

Las naturales metamorfosis y regeneraciones históricas quedaron grabadas en piedra sin más destino que el recuerdo del pasado.

De la fauna y flora solo guardamos memoria de los gestos de perplejidad antes de la extinción global

Los pocos humanos que sobrevivimos hasta ahora no queremos acordarnos de los costos del pasado

Después de varios siglos de acomodo a las nuevas condiciones los sobrevivientes reunidos en asambleas de representantes decidimos iniciar  desde cero la construcción de los nuevos edificios sociales.

Mucho esfuerzo se hizo para mover las telas de araña de atavismos y comprender que la humanidad equivocó el camino al elegir modelos y regímenes compatibles con el reparto del mundo en pocas manos.

Por pensar solo en la desgracia no tuvimos en cuenta los saberes acumulados a lo largo de la historia y los espejos de errores cometidos por poderes dominantes

Pero felizmente nos convencimos que una nueva ruta debe partir de los registros de conocimientos escondidos en las montañas como si fueran grandes vetas de oro

Decidimos airear las ideas para pensar en una sociedad fraternal sobre la base de la  solidaridad y el bien común separando  el grano de la paja y el conocimiento para todos del conocimiento para pocos

Pero como la tradición se viste de lentos protocolos los problemas han retrasado el inicio de los nuevos tiempos

Algunos afirmaron que las asambleas abiertas para todos deberían esperar con paciencia de Job hasta que la pera madure en sus propias ramas

Otros dijeron que se debería cosechar los frutos sin detenernos a pensar suficiente en la siembra y el cultivo

La vieja y tuerta convivencia viva aún a pesar de la hecatombe dio paso a la repetición de los tiempos idos

Igual que antes la gente común espera que San Juan baje el dedo sin pensar por cuenta propia en la posibilidad colectiva de comenzar una  nueva historia

En eso estamos y  solo a veces recordamos a la piedra como supuesto primera arma de la historia en la que apoyaron el poder los antiguos humanos para seguir con oleadas de corrupción y vandalismo armado

También recordamos con placer la brisa con aromas de los mares vivos y el agua cristalina de los manantiales que calmaron la sed durante la primera historia

Martín Mendo

Pachacámac, Mayo 2018

Imágenes Google: La vida es sueño, obra dirigida por Carlos Martín