Azul En la curva de playa la gran bahía abraza al mar azul bajo la eterna mirada del Fraile y de una sinfonía de gaviotas libres La arena es visitada por el alma de la brisa y por los besos húmedos de espumas bajo el murmullo continuo de las olas En el horizonte a las cinco de la tarde el sol se despide hasta el nuevo día quizás envuelto en sus propias utopías La brisa del atardecer se convierte en pincel surrealista y pinta de color azul mi piel cicatrizada a imagen y semejanza de la espera Mas cerca feliz acaricio con ternura una presente historia de vida llena de creyentes de la belleza del mundo Mientras tanto en la arena tibia la vida se hace incienso y sueños de opio con volutas de felicidades y desdichas Así el tejido biológico entregado al movimiento de las cosas en cada instante me hace respirar profundo y saborear la dicha de saberme inconcluso Mar